Este sendero circular te brinda la oportunidad de explorar los impresionantes nacederos de Iribas: Aitzarreta, que da origen al río Ertzilla, y Basakaitz, donde nace el río Larraun.
Comienza tu recorrido desde el aparcamiento situado en la entrada del núcleo urbano. Dirígete hacia la iglesia y continúa hacia el sur, dejando atrás el pueblo. Toma la pista que transcurre llanamente junto al depósito de agua. Después de 800 metros, en el primer cruce, sigue la pista que asciende a la derecha. En el siguiente cruce, toma el camino de la izquierda que desciende hasta la borda de Arotzenea. Desde allí, dirígete hacia el sureste por una pista que te llevará hasta la surgencia de Aitzarrateta, donde el río Ertzilla nace y forma una cascada.
Comienza el retorno. Retrocede unos 200 metros y gira a la derecha hacia las campas de Aiztondo, junto al río Ertzilla. Más adelante, el cauce del río gira a la izquierda. Podrás observar ramas acumuladas en el fondo: este es el sumidero del río Ertzilla, donde desaparece después de apenas un kilómetro.
Cruza el cauce seco formado por las aguas rebosadas del Ertzilla cuando el sumidero no puede contenerlas. Luego de una breve pendiente, llegarás a una pista que te conducirá hasta la sima de Lezegalde, el punto donde las aguas excedentes del Ertzilla se sumergen durante épocas de crecida intensa.
Desde aquí, continúa siguiendo el cauce seco que desciende por el valle de Uhantxoko hasta llegar a Basakaitz, el nacedero del río Larraun. Aquí emergen las aguas de este nuevo río. Sube en una pronunciada pendiente hasta llegar nuevamente a Iribas.