En un idílico rincón donde naturaleza, historia y leyendas convergen en armonía, se alza el magnífico conjunto monumental de Orreaga/Roncesvalles. Aquí, la Real Colegiata de Santa María resguarda un museo de arte sacro que merece ser explorado.
La exposición despliega una rica colección de tallas, lienzos, manuscritos antiguos e impresos, así como variadas piezas de orfebrería. Entre ellas, destacan el Evangeliario de plata románica, la Arqueta de plata dorada gótico-mudéjar del siglo XIII y el relicario llamado Ajedrez de Carlomagno, datado a mediados del siglo XIV. También se exhiben otras joyas, como la esmeralda de Miramamolín, trofeo obtenido por el rey Sancho VIII el Fuerte en la batalla de las Navas de Tolosa en 1212, hoy parte del escudo de Navarra. En la sección de pintura, sobresalen el Tríptico del Calvario, de la escuela de El Bosco, y la Sagrada Familia de San Juanito, obra de Luis de Morales.